Con el paso del tiempo hemos llegado a cambiar mucho las tradiciones en las bodas, ahora toco el turno para el famoso ramo de novia
que obviamente lo pensamos hecho con flores y eso ha cambiado por
completo. Es una nueva tendencia donde se hacen los ramos con todo menos
con flores es decir, desde prendedores, aretes, chocolates, papel,
corchos, madera, metal, cartón y de más cosas que se puedan imaginar, al
final el resultado es sorprendente.
Este nuevo adorno ha cautivado hasta a las personas más conservadoras pues lejos de verse raro, se llega a ver muy elegante y sofisticado, las novias dan de que hablar y se mira como algo innovador y único en su boda. Los ramos personalizados son más personales y perfectos para ser reciclados a diferencia de los hechos con flores naturales.
Hay lugares donde ya es una industria y
se dedican a elaborar estos accesorios, el experto lo elabora en base a
las ideas de la novia aunque al final de cuentas siempre habrá quien se
vaya por lo tradicional.
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